Por: Milagros Edwards
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En la soledad de la noche sentada bajo la faz de la luna, con el rostro despertando una nostalgia, me pregunto: ¿donde te encuentras? Y desmayo ante ti. Tal vez estés navegando entre mis sueños o solamente yo murmure tu nombre, aunque tú presencia no este cerca de mí.
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En la soledad de la noche sentada bajo la faz de la luna, con el rostro despertando una nostalgia, me pregunto: ¿donde te encuentras? Y desmayo ante ti. Tal vez estés navegando entre mis sueños o solamente yo murmure tu nombre, aunque tú presencia no este cerca de mí.
Miró hacia la nada, esa párvula existencia nihilista del poniente y la silueta de tu rostro se delinea a través del viento, sintiéndote cada vez más dueño de mis pensamientos.
Hoy parece ser un día confuso, parece cruzarse muchas cosas por mi mente, alborotando toda mi razón, tal vez sea porque necesito encontrar una respuesta a esta pregunta, pregunta que me esta atormentando desde hace días, eneros, diciembres…
Quisiera saber que vale mas ¿ La razón o el corazón ?
Desde aquel día que te empecé a conocer más, mi corazón empezó a dibujar lentamente tu nombre, en esa cáscara que lo cubre, arañando hasta llegar a la membrana misma de todo esto que se consume cuando te veo y tal ha sido esta dicha que ha plasmado un sentimiento muy profundo, en el que añoro algún día tenerte entre mis brazos, estrujándote tanto que seamos uno y besar la miel del capullo de tus labios y sentir que aquel aroma tan intenso que mana de ti, yazca en mi por siempre.
Como explicar que aquella mirada tan cautivadora “redundo por que lo mereces, por que lo quiero y quiero que lo sepas” me sedujo totalmente trasladándome a un mundo más allá de la realidad. Como podía dejar de pensarte, si tu sonrisa estaba reflejada en cada rincón de mi existencia, en cado roció del cielo, haciéndome siempre esclava de ti y todo lo que era tuyo.
Tal vez comenzar esto me costo el nombre que llevo, pero poco a poco fue gustándome, hasta que en un desliz de la noche, de las tantas que han visto deshojarse mi rostro por ti, lo decidí aceptar.
Como decir que no, si mi vida sin ti no tiene lumbre, ni silueta, no tiene una vida o una muerte. Además, a quien quiero engendrarle una sonrisa alegando que te olvide, si sabes bien que nada de eso es verdad, si mi corazón jamás pudo o podrá dejar de nadar en las aguas de tu cuerpo, pues cada vez que estas cerca, un hoyo se abre en mi garganta y me estruja el vientre y me come por dentro, envidiando los lirios que brotan de tus labios, pues en cada una de ellas hay un beso TUYO para mi.
Como no lograste entender todo el amor q nunca deje de proyectarte ¿acaso no ha sido tanto? Como dejar de demostrarte tan solo un mísero segundo quien soy verdaderamente, para que tomes mi mamo y sientas que estoy cálida a gracia tuya, que acerques tu rostro al mío y sepas que siempre estarás segura, sabiendo que a mi regazo los segundos se detendrán esbozando cada uno de estos momentos. Te lo prometo. Mírame a los ojos purpuras sin ti, mira el ondear de mis cabellos, cenizas que el viento lleva, aquella que juega con mi rostro hecho migajas… sin ti, silente alma mía que te pide.
Como ya has visto, me he desnudado en palabras para decirte que TE AMO…
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