Nos Escribe: Pedro Manuel Flores Chávezflores_chavez201@hotmail.com
Lo vivido ayer en las afueras del Estadio Mansiche de Trujillo fue para rechazar rotundamente por la aptitud matonesca de la policía nacional contra los barristas aliancistas que llegaron a la ciudad de Trujillo para alentar al equipo de sus amores, pero concluido el partido recibieron varazos, chicotazos, patadas y puñetes, por el solo hecho de formarse en grupos en la parte posterior de la tribuna sur, a la espera de los buses que los traslade de retorno a las ciudades de Lima, Chimbote, Piura y el Valle Chicama.
Pareciera que el detonante de esta agresión a los barristas aliancistas, se inicia por la banderola colgada durante el partido en la caseta para medios de comunicación en la parte central de la tribuna sur, donde en lo alto decía “Acuña ladrón, el pueblo te repudia”, en clara alusión del Alcalde de Trujillo y Fundador del Club Cesar Vallejo, Cesar Acuña Peralta, por el alto costo de las entradas para el partido de la UCV y Alianza Lima, donde la tribuna sur que ocupa la barra del equipo limeño costo 20 nuevos soles, el doble de un partido normal que se suele cobrar en 10 nuevos soles.
La represión contra la hinchada también fue con policía montada que sin ningún reparo no dudaron en pasar por encima de los hinchas que corrían por la calles ante la arremetida de policías que repartían palos y patadas sin medir consecuencias, se pudo apreciar como hinchas tratando de defender sus bombos y banderas, fueron atacados salvajemente por policías quienes de grupos de 10 atacaban a varazos y patadas a barristas que solo atinaban a defender sus cosas.
Se pudo apreciar a barristas ensagretantados por la brutal golpiza de la policía, entre las intersecciones de las calles de Atahualpa y Zepita por el colegio seminario San Carlos y San Marcelo, entre ellos se pudo apreciar a un hincha inconsciente jalado a rastras por mas hinchas que trataban de darle los primeros auxilios, luego de recibir un ataque sin compasión por la policía, al no haberse dejado arrebatar el mantón que mide más de 100 metros; además un policía en caballo no tuvo reparos en pasarlo por encima.
Sin lugar a dudas, fue un ataque cobarde de la policía nacional que confundió sus funciones o quien sabe tuvo la orden de un menuda autoridad que no le gusto que le colgaran una banderola e hicieran canticos en su contra, nos preguntamos ¿Estos hinchas que viene de lejos que imagen se habrán llevado de nuestra ciudad? ¿La Policía desfogo su rabia con los hinchas aliancistas por la falta de capacidad de no poder combatir a la delincuencia que sigue creciendo en la ciudad de Trujillo?, muchas preguntas que nos hacemos y sobre todo por lo ocurrido ayer, donde la policía se gano el premio de “barra brava” al confundir seguridad con agresión brutal.
Esperemos que estos actos no vuelvan a ocurrir en nuestra ciudad por que ayudaran a ausentar a los hinchas de los estadio, esperemos que para los próximos partidos se brinde un mejor resguardo policial, aunque lo vivido ayer fue a vista de padres de familias e hijos, que dudo mucho, vuelvan a pisar el estadio y sobre todo que valoren el trabajo de la policía cuando actúan de una manera violenta y salvaje, sería bueno que este mismo trato brinden a los verdaderos delincuentes que hacen de las suyas en ciudad primaveral de Trujillo.
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