Señor Gaspar, tiene usted razón con todos los datos sobre el desarrollo de nuestro país, sin embargo considero que los movimientos sociales ( y no lo digo yo, lo dice la defensora del pueblo), son producto de la exclusión, y de un desarrollo que no llega a la gran mayoría de los peruanos.
Las cifras macro económicas son correctas. Pero un país no vive solo de eso. Un país tiene que pensar en el bienestar de su población, en la inclusión, educación e investigación entre muchas otras cosas, que en el nuestro por desgracia aún no se toman en cuenta.
Gracias por su aporte, pero las expresiones sociales son producto de lo señalado líneas arriba, y no del terrorismo o de agentes externos.
Trujillo di?
Por: Enrique Benites Delgado
cosasdelalibertad@hotmail.com
Las cifras macro económicas son correctas. Pero un país no vive solo de eso. Un país tiene que pensar en el bienestar de su población, en la inclusión, educación e investigación entre muchas otras cosas, que en el nuestro por desgracia aún no se toman en cuenta.
Gracias por su aporte, pero las expresiones sociales son producto de lo señalado líneas arriba, y no del terrorismo o de agentes externos.
Trujillo di?
Por: Enrique Benites Delgado
cosasdelalibertad@hotmail.com
“2008 fue malo para la infraestructura latinoamericana: pocos anuncios de proyectos y pocas reformas hicieron que los países casi no avanzaran en esta nueva edición del ranking de infraestructura de América Latina. Pero hay excepciones: Brasil, Perú y las telecomunicaciones”.
Así comienza el informe especial sobre el análisis: Que tan bien preparados están los países de América latina para atraer inversiones en infraestructura. La consultora CG/AL convocada por la revista América Economía comparan una enorme fuente de datos en el desarrollo de energía eléctrica, servicios sanitarios, puertos, telecomunicaciones carreteras, y otros ítems más, así como la capacidad para “construir futuro”.
Este análisis también plantea que el mayor problema de los países es el que ahora se denomina “ingeniería financiera”. Es decir, la capacidad para atraer grandes inversiones que los proyectos necesitan. Analizados estos parámetros, el Perú, nuestra patria, y para orgullo nuestro, es reconocido como uno de los países que mejor crecimiento ha tenido y que su imagen en el mundo también ha mejorado. El informe en infraestructura dice: “Perú fue el gran ganador, ya que registra el mayor crecimiento de cualquier país este año, escala del puesto 11 al 8”. En energía dice: “Perú es este año la estrella, logrando conectar el combustible de camisea a la matriz energética así como el desarrollo de importantes proyectos hidroeléctricos”. En el sector sanitario dice: “Nótese también que los esfuerzos de Perú para incrementar su rendimiento en el sector sanitario han generado resultados impresionantes, logrando un avance desde la 15° a la 8° posición en un año”. Esto no lo digo yo ni el Presidente Alan García, lo dicen entendidos en materia económica después de analizar más de 40 variables durante seis meses en los 23 países de esta parte del continente. Esto no es triunfalismo. Falta mucho, sí, pero allí están de testigos los millones de ciudadanos de la costa y el ande que ahora cuentan con energía eléctrica, agua y desagüe que por siglos nunca lo tuvieron.
Todo lo contrario a lo que pregonan las aves de mal agüero y aquellos que se han quedado congelados en la historia con su dogma comunista: “acrecentar las contradicciones del país”, por ello las paralizaciones, las tomas de carreteras, los asesinatos de policías y el utilizar la ignorancia cultural de los más necesitados. Por ello se oponen al desarrollo, al progreso, por ello se oponen a la construcción de una hidroeléctrica en el sur del país que dará y garantizará agua y luz a todos sus ciudadanos. Que paradójico.
Para terminar citaré una estrofa de la canción de Horacio Guarany, “Recital a la paz”, que dice: “Con toda mi alegría levanto en este día mi canto por la paz, la paz en todo el mundo como un surco profundo donde florezca el pan, que los fabricantes de la muerte no regresen nunca, nunca jamás”. Vaya que es necesaria la unión de todos nosotros para lograr paz, desarrollo sostenido en nuestra patria, por consiguiente mejor calidad de vida.
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